Martes 25 de agosto de 2015 | Publicado en edición impresa
MIAMI.- La amplia ventaja de la oposición en las encuestas para las elecciones legislativas del 6 de diciembre en Venezuela está generando temores de que el gobierno autoritario del presidente Nicolás Maduro aproveche, o genere, un clima de caos para suspender las elecciones.
Casi no pasa un día sin que Maduro haga nuevas declaraciones o tome acciones -como el cierre de la frontera con Colombia el fin de semana- que hagan aumentar la sospecha de que está creando condiciones para realizar un autogolpe y suspender la votación, dicen varias fuentes opositoras. Maduro ha utilizado a jueces controlados por el gobierno para encarcelar a los principales líderes opositores, como Leopoldo López, bajo cargos absurdos, y al mismo tiempo ha inhabilitado a por lo menos 10 líderes opositores -incluida la carismática ex congresista María Corina Machado- para postularse para el Congreso en las próximas elecciones. Al mismo tiempo, Maduro ha dicho que Venezuela no permitirá que observadores internacionales de la OEA supervisen las elecciones de diciembre y que sólo permitirá un "acompañamiento electoral" de la Unasur, un organismo que ha sido benévolo con su gobierno.
Pero todas estas triquiñuelas no le alcanzarán para ganar las elecciones de diciembre. Con una inflación anual este año estimada en 180% y una economía que se ha desplomado más de 5% este año, cada vez más venezolanos se están poniendo en contra de su gobierno "revolucionario". Según una reciente encuesta de Datanalisis, el 87,2% de los venezolanos dice que la situación del país es mala o muy mala, y el 70,4% de los encuestados desaprueba la gestión de Maduro. Si las elecciones legislativas se celebraran hoy, la coalición opositora conocida como MUD ganaría por un margen de 23%, según Datanalisis.