Al menos 42 presuntos miembros
de un poderoso cártel narcotraficante y un policía federal murieron este
viernes en una feroz batalla desatada en una conflictiva región del
oeste de México, uno de los enfrentamientos más sangrientos de la lucha
antidrogas en el país. El
choque se desató en la mañana del viernes en un rancho del pueblo de
Tanhuato (estado de Michoacán) pero las autoridades no dieron un reporte
oficial de la balacera hasta la noche. Tras
advertir que se trata de un balance todavía "preliminar", el
comisionado nacional de seguridad, Monte Alejandro Rubido, dijo que se
"han contabilizado hasta el momento 42 presuntos delincuentes abatidos y
tres más detenidos", además de un policía federal muerto. Sin
citarlo directamente, Rubido señaló que el grupo armado pertenecería al
cártel Jalisco Nueva Generación, enemigo número uno del gobierno por
sus audaces y letales ataques contra autoridades. Según
la versión ofrecida por Rubido, el enfrentamiento comenzó cuando
militares destacados en el operativo Jalisco -dirigido a desmantelar al
cártel- se dirigían a investigar un rancho en el que sospechaban que se
escondían criminales y fueron atacados a tiros desde un vehículo.
ISIS toma el último puesto fronterizo entre Irak y Siria y consolida su poder territorial
Los yihadistas se adueñaron del pasaje Al Tanaf, luego de que las fuerzas sirias se retiraran del lugar. Con esto, el régimen de Bashar al Assad perdió el control de las fronteras sirio-iraquíes

Los yihadistas del grupo Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) tomaron el control del último puesto fronterizo del límite entre Siria e Irak aún en manos de las fuerzas gubernamentales, afirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
"Combatientes de ISIS se adueñaron del punto de pasaje de Al Tanaf en la frontera con Irak" luego de que "las fuerzas del régimen se retiraran", agregó el OSDH.
"El régimen ya no tiene ningún tipo de control en la frontera con Irak", afirmó la fuente.
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En
un golpe en territorio iraquí, el grupo islamista radical había tomado
esta semana la estratégica ciudad de Ramadi, haciendo retroceder a las
fuerzas del régimen.
Además, ISIS se apoderó de Palmira,
una ciudad siria con más de 2.000 años de antigüedad y un verdadero
cruce de caminos que lleva al gran desierto sirio fronterizo con Irak.
Con esto, el grupo ha asegurado su dominio sobre la mitad del territorio de Siria y amenaza a Homs, la tercera ciudad del país.
Desde hace varios meses, Estados Unidos encabeza una coalisión internacional que realiza bombardeos aéreos sobre los territorios tomados por ISIS. El grupo proclamó un califato en las zonas de ambos países bajo su control.